Luego de tres semanas de ejercicios prácticos y visionados de películas, los jóvenes terminaron esta experiencia inédita en el ICEI, organizada por el Programa Cero en Conducta. Una instancia en que adolescentes de diferentes comunas y edades pudieron compartir y descubrir sus horizontes creativos a través del lenguaje cinematográfico.
Con la presentación de sus propios cortometrajes de dos a cinco minutos, el trabajo final del curso, los estudiantes del Taller “Ver y Hacer Cine” culminaron su experiencia de tres semanas en el Instituto de la Comunicación e Imagen de la Universidad de Chile, ICEI, donde tuvieron la oportunidad de experimentar con los principales elementos de la materialidad del cine y ver películas con una estructura dramática diferente a la que estaban acostumbrados.
Los objetivos del taller fueron ampliar los horizontes creativos de los jóvenes, a través del desarrollo de aptitudes que aportaran significativa y positivamente a su formación como sujetos; y a partir de la valoración de la propia subjetividad y autoría por medio del análisis de los gestos subjetivos de los otros (compañeros y directores) y de la experimentación individual.
El taller contó con la participación 20 jóvenes, entre 13 y 19 años, provenientes de distintos establecimientos y regiones del país. Raquel Castañeda, de Copiapó, expresa que el curso le ha permitido apreciar el lenguaje audiovisual desde otra perspectiva. “Nos mostraron películas que no son el común, entonces nos abrieron un espacio para aprender y ver cosas desde distintos puntos de vista y realidades”, sostiene.
Mientras que Ignacio Letelier, proveniente de Chillán, afirma el taller le ayudó a ser más detallista. “Puedo mirar mejor las cosas, lo que me sirve para después hacer mejores tomas. Además, el ver películas a las que no estaba acostumbrado aportó a que se me abriera un mundo distinto en el cine, que antes no apreciaba tanto”, y añade que el curso le permitió reafirmar su vocación por el cine. “Junto a ello, pude adiestrarme más en grabar, definir mejor la puesta en escena y espero este año registrar más cosas con mis amigos”.
Nuevas metodologías en la enseñanza del cine
De acuerdo con el profesor Ignacio Agüero, responsable del curso y coordinador general del programa Cero en Conducta -iniciativa que busca acercar el cine a las escuelas más vulnerables del país – los jóvenes pudieron ver cine todos los días al enfrentarse a películas que están fuera del sistema habitual de películas de conflicto central; y hacer cine a partir de los ejercicios prácticos que realizaron todas las tardes después de terminadas las sesiones.
“Es la primera vez que en Cero en Conducta hacemos un curso tan largo, lo que nos planteó una exigencia mayor. La experiencia fue muy buena, acompañada además del entusiasmo y del interés de los alumnos reflejada en la calidad de sus entregas cada clase. Incluso ellos plantearon hacer un curso de nivel avanzado, el que podríamos pensar”.
El académico del ICEI también sostiene que el taller les permitió afirmar y explorar metodologías en la enseñanza del cine, siendo este el primero que se realiza fuera de una escuela, en un espacio universitario y durante tres semanas seguidas.
“Todas las cosas que hace Cero en Conducta están en el camino de probar nuevas metodologías. Lo que hicimos en este curso fue explorar, pero también afirmar ideas metodológicas que hemos ido desarrollando. Tenemos que recoger las experiencias de este y todos los demás talleres y sistematizarlas”, concluye Agüero.
El curso también contó con el apoyo docente de Francisca Soto, coordinadora de producción de la Escuela de Cine y Televisión, Pamela López, periodista de la Dirección de Extensión del ICEI, Constanza Contreras, coordinadora audiovisual del ICEI y Paola Campos, cineasta y Magíster en Cine Documental.